Por Willard Díaz
Espiral N° 7, Departamento de Literatura y Lingüística, UNSA.
En un esfuerzo encomiable el Departamento de Literatura y Lingüística de la Universidad Nacional de San Agustín ha editado el séptimo número de su revista “Espiral”. Bajo la responsabilidad del profesor Julio César Ticona, Presidente del Comité Editorial, se publican en esta ocasión artículos de Lingüística, Crítica e Historiografía literarias, Educación, Traductología, Arquitectura, Inteligencia Artificial, Danza y Narrativa. La revista es multidisciplinaria.
Al decir del presentador de este número, el doctor Dante Callo Cuno, el objetivo principal de “Espiral” es “difundir el conocimiento científico a un público amplio, incluyendo a personas en plena formación universitaria”. La revista es pues de divulgación.
Sería bueno, en futuras ediciones, ordenar por secciones los aportes de los redactores, y separar los artículos de los profesores de las colaboraciones de los estudiantes. En la multitud y la dispersión se pierde un poco la lógica de la lectura. También sería recomendable que el Comité Editorial encargue a un Corrector de Estilo la pulcritud de la redacción de los artículos, ya que se deslizan yerros de puntuación y coherencia en algunos textos. Todo con miras a la propuesta declarada por el doctor Callo Cuno de indexar pronto la revista. Los estándares de las agencias suelen ser muy exigentes en cuanto a la calidad formal y al nivel académico de la investigación, si la hubiera.
Contraste. Arte y Cultura, Universidad Nacional de Arte Diego Quispe Tito.
Desde su aparición en 2021 hasta la última edición registrada en 2023, la revista “Contraste” en sus seis números conforma una colección ejemplar de publicaciones académicas, con una calidad de diagramación, selección de textos, ilustración e impresión pocas veces vista.
El último número presentó la memoria de las ponencias de “K´anchay. I Simposio y Feria de Investigación en las Artes” realizado en Cusco en noviembre de 2022. Lo cual hace a la revista un ejemplar de consulta para toda institución educativa en Arte que, como la Diego Quispe Tito, enfrente la tarea de imaginar en qué consiste su investigación académica y qué formas puede presentar. No es lo mismo un proyecto, una investigación realizada o un informe de investigación en campo de la Ingeniería Civil o la Minería que en un arte como la música o la pintura. Si se trata de cumplir con los requisitos formales de SINEASE o cualquier agencia acreditadora, las Humanidades y el Arte llevan las de perder.
A fin de no abandonar el campo, las Instituciones dedicadas al Arte y la Cultura se ven obligadas a explorar formas y caminos que les permitan cumplir con los estándares aun a riesgo de postergar su fin estético y humanista. Resulta curioso, al revisar los objetivos y las políticas de calidad universitaria nacional que una palabra muy usada sea “crítica”, y que luego se pierda la idea al pasar a los planes y las programaciones, a las aulas. ¿Hay algo mejor que las Artes y las Humanidades para ejercer esa función social?
“Contraste” ha sido la expresión más lograda de propuestas sobre esas tareas en el país. Se la echa de menos.
